martes, 30 de agosto de 2022

LAS DIEZ MINAS

 

LAS DIEZ MINAS


En esta oportunidad estudiaremos una parábola enseñada por el Señor Jesucristo: Las diez minas. Esta cita la encontramos en Lucas 19 - 11:27.

11 Oyendo ellos estas cosas, prosiguió Jesús y dijo una parábola, por cuanto estaba cerca de Jerusalén, y ellos pensaban que el reino de Dios se manifestaría inmediatamente. 12 Dijo, pues: Un hombre noble se fue a un país lejano, para recibir un reino y volver. 13 Y llamando a diez siervos suyos, les dio diez minas, y les dijo: Negociad entre tanto que vengo. 14 Pero sus conciudadanos le aborrecían, y enviaron tras él una embajada, diciendo: No queremos que este reine sobre nosotros. 15 Aconteció que vuelto él, después de recibir el reino, mandó llamar ante él a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que había negociado cada uno. 16 Vino el primero, diciendo: Señor, tu mina ha ganado diez minas. 17 Él le dijo: Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades. 18 Vino otro, diciendo: Señor, tu mina ha producido cinco minas. 19 Y también a este dijo: Tú también sé sobre cinco ciudades. 20 Vino otro, diciendo: Señor, aquí está tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo; 21 porque tuve miedo de ti, por cuanto eres hombre severo, que tomas lo que no pusiste, y siegas lo que no sembraste. 22 Entonces él le dijo: Mal siervo, por tu propia boca te juzgo. Sabías que yo era hombre severo, que tomo lo que no puse, y que siego lo que no sembré; 23 ¿por qué, pues, no pusiste mi dinero en el banco, para que al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses? 24 Y dijo a los que estaban presentes: Quitadle la mina, y dadla al que tiene las diez minas. 25 Ellos le dijeron: Señor, tiene diez minas. 26 Pues yo os digo que a todo el que tiene, se le dará; mas al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. 27 Y también a aquellos mis enemigos que no querían que yo reinase sobre ellos, traedlos acá, y decapitadlos delante de mí.

 Bendito sea el Señor, bendito sea el Señor por su Palabra. 

Jesús confía en usted y en mi, cree en usted y en mí, nos ha dado talentos, habilidades que hay que atender hasta que Él venga. El Señor anhela que usted y yo seamos fieles y diligentes en nuestro deber y cuando el vuelva va a recompensar grandemente a los creyentes que fueron fieles, pero también va a juzgar severamente a los que no hacen absolutamente nada para divulgar, propagar y predicar el evangelio.En esta introducción se puede resumir esta parábola.

Jesús se vio en la necesidad de enseñarles esta palabra, por qué los discípulos estaban entendiendo algo mal. Jesús tenía que corregir ese concepto equivocado y enseñarles ese concepto correcto de Dios, ellos estaban pensando que el reino de Dios iba a ser instaurado de una vez y no era así. En la parábola Jesús es ese hombre noble, los conciudadanos son las personas del mundo, los incrédulos, los no creyentes. En el versículo 12 empieza diciendo: un hombre noble se fue a un país lejano para recibir un reino y volver; ¿Quién es ese hombre noble? El señor Jesucristo. Para que usted vaya hilando, entendiendo la parábola, lo que el Señor está transmitiendo, ese hombre noble, es el Señor Jesús, dice que se fue a un país lejano para recibir un reino; ese país lejano es el cielo dónde se encuentra en este momento, se fue a un país lejano, ¿para qué? para recibir un reino, ¿de quién? de parte del Padre, el Señor se encuentra sentado a la diestra de Dios Padre y se fue a ese país lejano, a ese reino de los cielos, se encuentra allá pero un día va a volver. Se fue a recibir un reino, el Rey de todo el universo, de Dios Padre, y va a volver. 

Por un tiempo… un tiempo estará ausente porque ese país lejano está a gran distancia. Pero el Señor no se fue por irse, se fue con una intención fundamental... volver. Se fue a recibir un reino, por eso dice la palabra: En la casa de mi Padre muchas moradas hay y el Señor dice la palabra: Voy pues a preparar lugar para vosotros y si me fuere y os prepararé lugar vendré otra vez y os tomaré a mí mismo para que donde yo estoy también vosotros estéis… eso está en Juan capítulo 14.

Eso es lo que está hablando esta palabra. Aquí habla de minas, la mina se le llama a una moneda griega qué era equivalente a 100 dracmas, 1 dracma era equivalente a una jornada laboral diaria, haga cuenta a un salario mínimo legal diario, una mina equivalía a 100 días de salario. 

Dice que este hombre noble  se va un país lejano con dos objetivos, recibir un reino y volver, ese es Cristo Jesús; Él mismo está describiendo su labor, se va a ir,  para el reino de los cielos, recibir el reino de parte del Padre y va a volver; pero antes de irse les dejo minas a 10 siervos suyos,  y qué curioso aquí habla de 10 siervos suyos y la parábola de las vírgenes habla de 10 vírgenes, el número 10 es un número relacionado con el servicio, muchos sirven pero no son abnegados con el servicio, hace falta abnegación, es lo que se nos narra aquí. 

Y antes de irse llama a sus siervos y les entrega algo de valor… un tesoro, ese tesoro hoy ¿Cuál es?  Porque todos vamos a pasar por aquí, usted hace parte de esta parábola y yo también como todos los creyentes, creyentes verdaderos hijos de Dios hacemos parte está parábola o vamos a hacer parte de ella cuando el Señor venga a juzgar y demande cuentas, usted y yo hacemos parte. Y esas minas, eso de valor que el Señor ha dejado a cada uno de los creyentes ¿Qué es? La palabra, el evangelio, las escrituras. Llama a sus siervos, les da las 10 Minas y les dice negocien entre tanto que yo vengo, pero allí donde habitaban en este mundo, los incrédulos, dice los conciudadanos, los ateos, etc. le aborrecían, le aborrecían a Jesús;  y enviaron una  embajada, unos  representantes diciendo: no queremos que esté reine sobre nosotros, eso hace la gente hoy, mire los problemas que estamos teniendo con grupo satánicos, mire los problemas que estamos teniendo con la moda, con la música, con todo lo que se hace o se dice a través de la música secular, con la filosofía, hoy la gente literalmente está afanada es en vivir, en gozar y vivir su vida pero aborrecen a Jesús y no lo quieren, no quieren que el Señor Jesús reine sobre sus vidas.

Pero, en el versículo 15 sucede algo… dice: aconteció qué vuelto él, después de recibir el reino mandó a llamar (ponga aquí  su nombre). Cristo va a volver, y ojala lo coja  a usted preparado y a mí también, va a venir en Gloria, va a venir Coronado, va a venir  vestido de poder y autoridad, va a venir a juzgar todas las cosas, ya no será el tiempo de la gracia, y después de recibir el reino viene y mandó a llamar ante él.

Esta expresión "ante él" significa que nos va a pedir cuentas, a todos, usted y yo vamos a ser llamados a dar cuentas que hicimos, cada uno vamos a estar parados delante del Señor para dar cuentas… ahí no va a estar nadie para ayudarle, es como un examen, como una evaluación ante el Dios del cielo. 

Imagínese usted ese momento, usted va a dar cuentas. Manda llamar a los siervos, a los cuales les había dado dinero, podríamos decir a los cuales les había entregado el tesoro de la palabra para saber lo que había negociado cada uno…  la evaluación va a ser independiente y aquí no van a valer excusas hermano… o dimos fruto o no dimos fruto. 

Aconteció que vuelto el después de haber recibido el reino, mandó a llamar a los siervos a los cuales les había dado el dinero para saber qué había hecho  cada uno y aquí va empezar  cada uno a rendir cuentas…¿Que le va a decir usted? "El negociar", esa palabra negociar viene de una  palabra griega qué es "pragmáteuomai" qué significa: hacer negocios, estar ocupado, trabajar duro en producir ganancias, y este es el único lugar en el Nuevo Testamento donde se usa esta palabra negociar. 

A usted Dios le entregó la palabra, la capacidad de hablar, caminar, desplazarse, relacionarse con otros, dones. Si el Señor viniera hoy y le pidiera cuentas de este año ¿Que tendría usted para decirle? Dice que llamó a sus siervos ¿Porque dice sus siervos? Porque estos siervos creían en él, pertenecían a él, a su casa, al igual que usted y yo pertenecemos al Señor… Este hombre noble puso sus negocios en manos de sus siervos, Dios ha puesto la gran responsabilidad sobre la vida de cada uno de nosotros de predicar la palabra, y esta palabra negociar es una palabra que denota la acción diligente de alguien para que eso que se le ha entregado sea multiplicado… ¿Cómo está usted multiplicando la palabra de Dios hoy? ¿Qué está haciendo usted para que la palabra sea multiplicada hoy? 

O su vida en Cristo se volvió como cientos de creyentes que se limitan única y exclusivamente a esperar que Dios les dé y les bendiga. Los ciudadanos del mundo aborrecen a Cristo, rechazan su gobierno, rechazan su señorío. Cuando habla aquí la palabra de conciudadanos está hablando de esos personajes; le aborrecían, la palabra dice: A lo suyo vino y los suyos no le recibieron, las escrituras hablan claramente del juicio que habrá, va haber un día de juicio y aunque nosotros somos salvos vamos a hacer juzgados y evaluados… ¡por favor vuelva y lea! Vamos a ser juzgados y evaluados de acuerdo a lo que hicimos para predicar la palabra. La función principal es esa, tenemos la obligación y el deber de apoyar la iglesia de mil maneras… sí y qué bueno que lo hacemos y qué bueno que usted tenga ese deseo de hacerlo y si alguien que no lo está haciendo y tiene ese deseo pues por favor hágalo saber, siempre en la obra del Señor hay algo por hacer, pero la función principal es predicar la palabra, predicar la palabra, usted no debe llegar a la presencia de Dios y decirle Señor yo no predique pero siempre acomode las sillas, yo no predique pero siempre fui intercesor, yo no predique pero yo di devocionales, yo no predique pero yo ayudo al Pastor… ¡No! usted debe dar fruto de almas porque va a recibir una recompensa… ¡ah no, no, no es que a mí no me interesa la recompensa! ¡Debe interesarle! la Biblia dice que debemos anhelarla, que se debe buscar, entonces no nos pongamos de orgullosos y avispados con Dios, y le tiene que interesar la recompensa porque resulta que lo que usted va a recibir va a tener un impacto por la eternidad en el cielo, eso le va a dar a usted un lugar y privilegios por la eternidad… no es por algo temporal es por toda la eternidad.

 Dice el libro de Romanos capítulo 14 verso 12 De manera que cada uno de nosotros dará a Dios cuenta de sí, cada uno de nosotros… dice la palabra en 2 de Corintios 5:10 Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo sea bueno o sea malo. Dice 2 de Timoteo 4:1 Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino. Les repito y le insisto… ¿Qué fruto estamos dando para el Señor?  ¿Qué fruto de almas? No diga…yo estoy dando fruto de santidad, no hermano  literalmente es una obligación, es un mandamiento, tenemos que cumplir con este mandamiento de santidad, de obediencia, de servirle al Señor eso es un mandamiento.

Es mi oración que tengamos conciencia de la importancia del fruto, nos tenemos que preocupar por dar fruto, por ser luz para otros porque el Señor eso lo va a juzgar, lo acabamos de leer dice Mateo 16:27 Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras. Dice la palabra en Mateo 25: 31- 32 Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los santos ángeles con Él, entonces se sentará en su trono de Gloria y serán reunidas delante de Él todas las naciones y apartará los unos de los otros como aparta el pastor Las ovejas de los cabritos. ¡Juicio... juicio! 

En esta parábola se nos enseña que llega un día en el que se tuvo que rendir cuentas, verso 15: aconteció que vuelto él, aconteció que regresando, él llamó a todo mundo a rendir cuentas, dos siervos fueron fieles, el siervo que trabajo al 1000 por ciento fue felicitado por el Señor, el siervo que produjo el 50% que produjo la 5 Minas también fue felicitado, fueron recompensados exactamente según su trabajo, una ciudad por cada mina, se hizo una justicia perfecta, cada siervo sin darse cuenta determinó cuál sería exactamente su recompensa; pero fíjense que fueron puestos sobre ciudades para gobernar. ¿En el cielo usted sabía que van a haber gobernadores? va haber gente que va a gobernar, va a haber gente que va a servir, van a haber rangos en el cielo, va a haber una sociedad.  Debemos pensar en eso y trabajar en eso, estos creyentes gobernaron sobre ciudades, en cambio el siervo que no trabajo ¿Que recibió? Primero no hizo nada, nada con lo que el Señor le dio, nunca tuvo visión, nunca tuvo deseo, nunca tuvo un sentido responsabilidad, nunca se proyectó a dar fruto para el Señor, no le importó el crecimiento del reino, subestimo el don, la mina que Dios le dio, se confío, se relajó, estuvo siempre llena de argumentos mediocres y… 

¿No es eso acaso lo que pasa hoy también? ¿No es eso acaso lo que vemos hoy? Intento justificar su comportamiento e hizo algo terrible… ¿Sabe que hizo? Acusó al Señor, al Señor noble, en está parábola dice que lo acusó ¿de qué? de ser severo, ¿Acaso no es lo que hace mucha gente hoy? Es que uno le habla a la gente y a la gente no le interesa… si pero ¿A cuánta gente le habló? ¿le habló a 10? Háblele a 100.  Entonces este siervo que no hizo nada, lo que hizo fue acusar al Señor, este siervo es catalogado como un siervo infiel y es calificado como un mal siervo; pero mire algo, no fue condenado por lo que hizo, sino por lo que no hizo y fíjese en una cosa en el verso 22 le dice el Señor mal siervo, cuénteme. ¿Usted es buen siervo o mal siervo? Este siervo era creyente, era de buena moral, tenía una conducta decente, era una persona éticamente correcta, pero falló en usar sus dones para edificar el reino de su Señor, su pecado fue de omisión no de comisión, porque no trabajo activamente en extender el reino, sentía que el Señor exigía demasiado y que era demasiado estricto.

 Así  hay gente, así se encuentra usted gente, se cargan porque se les dice que mueven una silla, se cargan porque se le dice que lleguen a las 8 de la mañana, se cargan porque le dicen que lleguen a tiempo, a que cumplan con lo poco que se les pide ya están cargados. ¿Usted es buen siervo  o mal siervo? Pero se cargan con el pastor y la emprenden contra el pastor  ¡son como bestias que no entienden! no entienden a quién le sirven hermano y esa problemática se ve hoy y la gente anda tan cansada, tan atareada de trabajo, de estudio, de negocios, de viajes, se les está pasando la vida y cuando el Señor los llamé a cuentas ¿Que le van a decir? "Ay señor yo no gané almas para ti, pero hablo tres idiomas, es que la vida se me fue estudiando eso". 

En el cielo sus 3 idiomas o sus 20 idiomas le van a servir para tres cosas; porque todos vamos a hablar el mismo idioma, allá eso no le va a servir para nada, en el cielo hay una lengua universal ¿Qué le va a decir? "Ay, Señor a mi se me fue la vida pero yo creé empresa y funde tres multinacionales, tuve mucho poder mucho dinero, funde hospitales, di plata para donar, para la creación de bibliotecas, teatros maravillosos". Eso al Señor no le va a importar, la pregunta de este señor noble como lo dice aquí la palabra, un hombre noble va a ser ¿Usted que fruto dio para mí? ¿Qué tanto usted predicó la palabra en su barrio? "Ay es que lo que pasa es que uno trabajando y siempre con los mismos 5 al lado del cubículo mío, yo sin tiempo"

Hermano usted vive en medio de un barrio y una sociedad, dónde hay negocios, tiendas, centros comerciales, donde usted puede entregar tratados, donde usted puede, se le puede acercar a la gente, ¡delante de Dios excusas no van a haber! ¡delante de Dios excusas no van a haber! llega a su trabajo se encierra en su oficina y 5 personas hay, pero cuando usted entra y sale hay porteros, secretarias, recepcionistas, hay celadores, hay aseadoras, cientos de personas a las que usted puede llegar… y ni para qué le digo a los que trabajan en colegios y a los que trabajan transportando gente, ahí donde usted vive tiene vecinos.

Tenemos que meditar en esto hermano y que el Señor nos ayude porque no se nos puede pasar la vida pensando solamente en nuestras necesidades personales, emocionales, sexuales, económicas, en las qué usted quiere cambiar de trabajo y ganar más plata, tener holgura financiera, sanarse. El Señor nos ayude a tener conciencia de esto, el Señor nos ayude a abrir la boca, el Señor nos ayude a hablar.

Dice la palabra que los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento y los que enseñan la justicia a la multitud como las estrellas a perpetua eternidad, amén. Daniel 12:3

Dice la palabra, sabiendo que el bien que cada uno hiciera ese recibirá del Señor.

Bendito sea Dios, bendito sea el Señor; Padre queremos en esta hora orar, danos el valor el denuedo para dar fruto y ser de testimonio Señor a tanta gente, danos el valor, danos las ideas, las estrategias, ayúdanos a despojarnos de toda excusa, porque la verdad es que estamos muchas veces llenos de excusas, hay mucha excusa en nuestro corazón, como este mal siervo, la excusa fue que consideró que el Señor era severo, perdónanos porque a veces estamos llenos de excusas, temor a que nos rechacen, la falta de tiempo, la poca gente con la que nos relacionamos a diario, estamos llenos de excusas Señor y callamos tu palabra y no predicamos y sentimos que nuestro círculo es pequeño y estamos con la excusa de la falta de tiempo. Si empleáramos 2 o 3 horas semanales para llegarle a gente nueva desconocida con la palabra con tratados, con las las herramientas que nos da nuestra iglesia, perdona nuestra mediocridad, perdona nuestra comodidad, perdona está vida egoísta que solo nos alcanza para pedir por nuestra familia y por nuestros intereses, porque viendo bien a nuestra familia nos sentimos bien nosotros, pero poco nos importan los demás; con razón tu palabra dice que la mies es mucha pero los obreros son pocos Señor.

Yo quiero ser obrero, yo quiero hacer lo que tú has mandado, si tú nos diste este ministerios es para ser luz, mira el nombre que le has dado a este ministerio, que más que un nombre, es una tremenda responsabilidad sobre la que tú nos vas a demandar cuentas un día y dónde nos vas a decir bueno ustedes se llamaban Embajadores de Esperanza… ¿A cuánta gente invitaron a reconciliarse conmigo? ¿A cuántos?  Bendito Dios que podamos decir ese día a miles Señor, que seamos sembradores, ya la cosecha y el fruto tú te encargas de eso, pero que nosotros Señor metamos las manos en tus negocios, en el negocio de ganar almas para ti, arrebatándolas del diablo, de una condenación eterna, quizás muchos nos van a rechazar, otros se burlaran, pero no importa, danos el valor para hacerlo, al vecino, al de la tienda, la panadería, danos las estrategias para invitar a  estos espacios devocionales completamente evangelísticos, ayúdanos Jesús que cada uno se inquiete a evangelizar a sus familias, a organizar talleres, reuniones para evangelizar, te lo pedimos Padre ayúdanos y danos el valor y el denuedo, queremos cumplir con lo que tú nos has mandado, dar frutos para ti en el nombre de Jesús, ayúdanos, guárdanos y respáldanos y sobre todo Señor una vez más perdónanos, perdónanos Señor, hace falta fuego, hace falta pasión por la obra, hace falta interés, hace falta salirse de la zona de comodidad espiritual en la que el diablo nos mete precisamente para que no abramos precisamente la boca para predicar tu palabra. Gracias Señor Amén y amén.


Pastor John Jairo Camargo
Embajadores de Esperanza
Iglesia Cristiana Integral



¿Idealizando?

 ¿Quien dijo que la vida es fácil? ¿Quien dijo que caminar tomado de la mano de DIOS es fácil? ¿Quien dijo que en esta vida todo es felicida...